La ausencia disminuye las pequeñas pasiones y aumenta las grandes, lo mismo que el viento apaga las velas y aviva las hogeras. (Rochefoucauld)

lunes, 3 de junio de 2013

VEINTIUN POEMA DE AMOR (ADRIENNE RICH)



Porque ya no somos jóvenes, las semanas han de bastar
por los años sin conocernos. Sólo esa extraña curva
del tiempo me dice que ya no somos jóvenes.
¿Caminé yo acaso por las calles en la madrugada, a los veinte,
con la piernas temblándome y los brazos en éxtasis más pleno?
¿Acaso me asomé por alguna ventana buscando la ciudad
atenta al futuro, como ahora aquí, esperando tu llamada?
Con el mismo ritmo tú te aproximaste a mí.
Son eternos tus ojos, verde destello
de hierba salvaje refrescada por la vertiente.
Sí. A los veinte creíamos ser eternas.
A los cuarenta y cinco deseo conocer incluso nuestros límites.
Te acaricio ahora, y sé que no nacimos mañana,
y que de algún modo tú y yo nos ayudaremos a vivir,
y en algún lugar nos ayudaremos tú y yo a morir.






Adrienne Rich


 

5 comentarios:

Marisa dijo...

En esos versos
me reconozco.
La ternura
y la nostalgia.

Brazo grande.

MAJECARMU dijo...

Una consciencia del ayer y el hoy en los ojos del poeta, que sabe valorar la vida con entrega y confianza...No temiendo ya al sentimiento ni a la muerte...
Mi gratitud y mi abrazo grande por estos bellos poemas,amigo.
M.Jesús

Trini Reina dijo...

La aceptación del paso de la edad y el comprender de lo que somos capaces de hacer ahora cuando antes, de jóvenes, era inviable.
Y luego, ese saber lo que se tuvo y tener claro el conservarlo (aunque sea en la memoria) y asirse de ello desde el sobrevivir hasta el morir...

Abrazos

MTeresa dijo...

Preciosos versos,
una belleza perpetua
como el amor.

Pilar Contreras dijo...

Me ha encantado estos sentimientos que fluyen en decadencia aferrados entre laberintos de ingratos amores. Gracias por dejarnos compartir estos preciosos poemas, un abrazo inmenso Pilar