La ausencia disminuye las pequeñas pasiones y aumenta las grandes, lo mismo que el viento apaga las velas y aviva las hogeras. (Rochefoucauld)

lunes, 10 de diciembre de 2012

PAJARO LEJANO (PEDRO GANDÍA)



Recuerdo aquel cristal de tiempo plano y frío.
Aquel amor primero.
Recuerdo su mullida voz blanquísima,
y aquellas dos columnas esbeltas de sus piernas.
Recuerdo su mirar de flores de azabache
y aquellas mariposas que, en su pecho colérico
de arena, se estrellaban.
Recuerdo la espiral violenta de su boca,
las fresas de sus besos,
y recuerdo que un día se perdió bajo tierra.
Y yo me volví loco, y se llenó mi cama
de nervios y de ardillas.


Pedro Gandía



3 comentarios:

Marinel dijo...

Hay amores,que sencillamente,son imborrables,se hacen esquivos a morir del todo y hacen emerger un tumulto de sensaciones.
No conozco al autor,pero me ha parecido un hermoso poema.
Besos.

Trini Reina dijo...

La ausencia hiriendo hasta la locura... O el amor.

Abrazos

Marisa dijo...

El inolvidable amor primero.

Precioso.

Un beso